Sé que muchas adoramos los zapatos y pensamos que
“muchos nunca serán tantos”, pero esta vez quiero hablar de ellos desde accesorio
para decoración. Una silueta tan perfecta que se ve bien en todas partes.
Hace casi 3 años que compré muchas hormas
antiguas a unos zapateros y comencé a pintarlas, tengo este ejercicio un poco
abandonado pero tengo algunas en varios espacios de mi casa y la verdad son muy
versátiles. Desde las originales, rústicas, con huellas del trabajo que
cargaron, hasta pulidas, pintadas a mano y con elementicos pegados para darles
más personalidad.
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| Una de ellas inspirada en un converse y la otra con tipografía en stencil |
Las tengo bien guardaditas, porque aunque todavía
se conseguen en viejas zapaterías, ya son más escasas y son objetos muy valorados
por quien los tiene, ya que se han reemplazado por unas plásticas que no tienen el romanticismo y nostalgia de las de madera.
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| Este "al natural" lo tengo en el balcón con un maniquí |
Muchos almacenes de zapatos las han usado como
percheros y ambientación, pero no dudes en apropiarte de algunas para usarlas
como elemento vintage en tu casa, ya sea en una mesa, en el piso, en las
puertas, repisas, donde quieras se verán muy bien.
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| Estas dos en una mesita del balcón, aunque a veces las bajo para el piso |
Además de las mias, les comparto estas otras fotos de pinterest para que se sigan inspirando...
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